Entrar por la puerta estrecha.

Entrad por la puerta estrecha; porque ancha es la puerta, y espacioso el camino que lleva a la perdición, y muchos son los que entran por ella; porque estrecha es la puerta, y angosto el camino que lleva a la vida, y pocos son los que la hallan.

Mateo 7:13-14 (RVR1960)

Cambiador del Mundo: Necesitamos entender que seguir a Jesús como cristianos nacidos de nuevo, representa darle la espalda al pecado de este mundo, a sus falsas riquezas, a su corto tiempo de fama y prosperidad para entregarnos de por vida a los brazos de Jesús. Cuando venimos a Cristo entramos por la puerta estrecha y por el camino angosto, ya que muchos de los que antes caminaban con nosotros no querrán hacerlo más (1 Pedro 4:4-8), incluyendo desde luego a personas de nuestra familia como también lo declaró el Señor: no penséis que he venido a traer paz a la tierra; no he venido para traer paz sino espada, y aun muchos entrarán en disensión, el hombre contra su padre, la hija contra su madre y la nuera contra su suegra, y los enemigos del hombre serán los de su casa. El que ama padre o madre más que a mí, no es digno de mí; el que ama a hijo o hija más que a mí, no es digno de mí; y el que no toma su cruz y sigue en pos de mí, no es digno de mí. El que halla su vida, la perderá; y el que pierda su vida por causa de mí, la hallará (Mateo 10:34-39). *Solo la vida de Cristo en nosotros derramando Su amor y gracia desde del día que nos convertimos, podrá sostenernos en nuestro caminar cristiano, porque en lo natural, nadie pudiera hacer y resistir lo que Dios nos manda en estos versículos, pero el Espíritu Santo de Dios en nosotros, sí puede hacer la obra si se lo pedimos. Cristo te ama y quiere ser tu esperanza de gloria y quiere ser tu Rey y Señor para cambiar el mundo (Colosenses 1:26-27, Romanos 10:8-13, Mateo 28:19-20). Aleluya.

Hagamos el bien

Así que, todas las cosas que queráis que los hombres hagan con vosotros, así también haced vosotros con ellos; porque esto es la ley y los profetas.

Mateo 7:12 (RVR1960)

Cambiador del Mundo: El hacer el bien a nuestro prójimo es la voluntad de Dios para Sus hijos, los cristianos que hemos nacido de nuevo. Antes de recibir a Cristo en nuestro corazón, debemos de admitir que vivíamos para nosotros mismos, buscando nuestras metas e intereses personales, porque una vida sin estar entregado a Dios, estará llena de egoísmo. Cuando Jesús vino a la tierra hizo por nosotros lo que nadie más hubiera hecho, y fue el dar Su propia vida y derramar Su sangre por el pecado de todo el mundo. Jesús abrió el camino de regreso al Padre para todo aquel que se arrepienta, le confiese su pecado, crea en Su muerte y resurrección, y declare que el Hijo de Dios ahora está sentado a la diestra del Padre en los cielos. Nosotros los que somos cristianos nacidos de nuevo, somos un testimonio de todo lo que Jesús hace por aquellos que le aman y por eso también estamos comprometidos a testificar Su Evangelio a todas las naciones y a llevar esperanza a todo aquel que demande querer conocer del amor y la gracia de nuestro Señor Jesucristo. *Todo lo que queramos que las personas hagan con nosotros, pidámosle a Dios que nos de la gracia para que nosotros amemos y derramemos nuestra vida por nuestro prójimo, porque esto nos abrirá los cielos a Sus promesas. Cristo te ama y quiere salvarte (Romanos 10:8-13). Cristo en nosotros nuestra esperanza de gloria y nuestra victoria que por Su amor y gracia nos permite predicar Su Palabra para cambiar el mundo (Colosenses 1:26-27, 1 Corintios 15:10, 57, Mateo 28:19-20, Juan 15:12-13). Aleluya.

Pedir, buscar y llamar

Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá. Porque todo aquel que pide, recibe; y el que busca, halla; y al que llama, se le abrirá.
Mateo 7:7-8 (RVR1960)

Cambiador del Mundo: Estos versículos son de las mayores promesas que un cristiano puede abrazar. Comenzando con la oración, de la que un hijo de Dios depende, ésta normalmente comprende pedirle a Dios, buscar Su rostro y llamarle, no importa cuánto demore las respuestas, éstas tres cosas tiene que hacer todo aquel que se ha entregado a Jesús. Si comenzamos por revisar nuestra acción de pedirle a Dios, nos daremos cuenta que Sus respuestas muchas veces no llegan tan pronto como las esperamos y tampoco llegan las cosas que pedimos, porque Él sabe lo que nos conviene y cuándo es el mejor tiempo para recibirlas, pero eso no significa que no sigamos de rodillas y alimentando nuestra fe y confiando que El hará lo mejor por nosotros conforme a Su eterno propósito por el cual nos llamó. *Buscar Su rostro es la principal prioridad de un verdadero cristiano, porque de esa manera fomentamos nuestro amor e intimidad con Dios, provocando que nuestra fe vaya creciendo día a día y nos permita descansar plenamente en los brazos de Jesús (Mateo 11:28-30). El Apóstol Pablo nos manda a orar sin cesar, dando gracias a Dios en todo y por todo para no apagar el Espíritu Santo de Dios en nosotros (1 Tesalonicenses 5:17-19). Tocar la puerta para que Dios nos pueda abrir los cielos y recibir Sus promesas, viene íntimamente ligado a pedir a Dios y a buscar Su rostro y por supuesto que el mejor camino de tocar la puerta es en ayuno, oración y alimentándonos de la Palabra de Dios la Santa Biblia, y no dejar de congregarnos, porque de ahí vendrá nuestra respuesta. Cristo te ama y quiere entrar a tu corazón para ser tu Rey y Señor (Romanos 10:8-13). Cristo en nosotros nuestra esperanza de gloria y nuestra victoria que por amor y gracia, nos permite predicar para cambiar el mundo (Colosenses 1:26-27, 1 Corintios 15:10, 57, Mateo 28:19-20, Juan 15:12-13). Aleluya.

Dios y las riquezas

Ninguno puede servir a dos señores; porque o aborrecerá al uno y amará al otro, o estimará al uno y menospreciará al otro. No podéis servir a Dios y a las riquezas.
Mateo 6:24 (RVR1960)

Cambiador del Mundo: Nuestro Señor Jesucristo nos recalca en esta Escritura que nadie puede servir a dos señores, porque aborrecerá a uno y amará al otro, tampoco se puede servir a Dios y a las riquezas. Pero en lo natural no podremos entender lo que el Señor aquí nos dice a menos que tengamos la revelación del Espíritu Santo, ya que es normal que cualquier persona quiera vivir dedicada a trabajar o hasta afanarse por todo lo que necesitará para su diario vivir. *Necesitamos abrazarnos de Dios y de Su Palabra para poder entender que cuando caminamos buscando el propósito eterno de nuestro Creador, Él también nos provee todo lo que necesitamos y obviamente estamos considerando techo, abrigo y alimento (Mateo 6:33). Cuando conocemos lo que está escrito en la Biblia para los hijos de Dios, es que podemos descansar de nuestros afanes viniendo a los brazos de nuestro Señor Jesucristo. El mundo siempre nos estará tentando a amarlo, a codiciar sus riquezas y siempre estar insatisfechos con ellas, pero el Apóstol Juan nos habla de que no amemos al mundo ni las cosas que están en el mundo, porque todo lo que hay en él, los deseos de la carne, los deseos de los ojos, y la vanagloria de la vida, no provienen del Padre sino del mundo y el mundo pasa y sus deseos también; pero el que hace la voluntad de Dios, permanecerá para siempre (1 Juan 2:15-17). Cristo te ama y quiere ser el Rey y Señor de tu vida, si tú le abres tu corazón y lo invitas a vivir en ti (Romanos 10:8-13). Cristo en nosotros es nuestra única esperanza de poder alcanzar la gloria y la victoria de Dios y de poder llevar Su Evangelio hasta el último rincón de la tierra para cambiar el mundo (Colosenses 1:26-27, 1 Corintios 15:10, 57, Mateo 28:19-20). Aleluya.

Los ojos, la lámpara del cuerpo

La lámpara del cuerpo es el ojo; así que, si tu ojo es bueno, todo tu cuerpo estará lleno de luz; pero si tu ojo es maligno, todo tu cuerpo estará en tinieblas. Así que, si la luz que en ti hay es tinieblas, ¿cuántas no serán las mismas tinieblas? Mateo 6:22-23 (RVR1960)

Cambiador del Mundo: Una de las interpretaciones que se la ha dado a estos dos versículos bíblicos, es que nuestros ojos no los pongamos en los tesoros de la tierra, sino que los pongamos en Dios y en Sus promesas escritas en las Sagradas Escrituras.
*Cuando una persona entiende su llamado para servir a Jesús, y está completamente arrepentida de su pasado y lo ha dejado atrás, el mismo Espíritu Santo que llena el corazón de un cristiano nacido de nuevo, dirigirá su vista hacia los tesoros eternos, lo que aquí en la tierra no se pueden cuantificar pero en los cielos Dios tiene la perfecta recompensa de todos aquellos que tomaron su cruz, crucificaron su Yo, y lo siguieron hasta el último día aquí en la tierra.
El mundo y su príncipe de tinieblas que lo gobierna, no se detendrá en seguirnos invitando a dedicarnos a ganar sus riquezas temporales que pueden ser robadas y que no tienen ninguna recompensa cuando nos presentemos ante el tribunal de Cristo. Porque todos nos presentaremos delante de Jesús a rendir cuentas de lo que hicimos en esta vida para que cada uno reciba según lo que hizo mientras estaba en el cuerpo, sea bueno o sea malo (2 Corintios 5:10).
Cristo te ama y quiere que lo invites a entrar a tu corazón y que le rindas tu vida aquí en la tierra, porque El sabe galardonar por la eternidad a los que le aman (Romanos 10:8-13).
Cristo es en nosotros la única esperanza de ver la gloria de Dios en nuestra vida y de alcanzar la victoria y la corona eterna que El mismo dará a todos los que le aman. Prediquemos Su Evangelio para que pueda cambiar el mundo (Colosenses 1:26-27, 1 Corintios 15:10, 57, Mateo 28:19-20, Juan 15:12-13). Aleluya.

Hagamos tesoros en el cielo

No os hagáis tesoros en la tierra, donde la polilla y el orín corrompen, y donde ladrones minan y hurtan; sino haceos tesoros en el cielo, donde ni la polilla ni el orín corrompen, y donde ladrones no minan ni hurtan. Porque donde esté vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón.
Mateo 6:19-21 (RVR1960)

Cambiador del Mundo: Por supuesto que solamente un cristiano nacido de nuevo, puede entender lo que Jesús nos está hablando en estas Escrituras, porque el hombre natural vive afanado en todo lo que el mundo ofrece y no se percata que todas estas riquezas son vanas y ninguna de ellas se podrán llevar al cielo el día que se presenten ante al Tribunal de Cristo (2 Corintios 5:10). El Apóstol Pablo le enseñó a Timoteo que la raíz de todos los males es el amor al dinero y el cual codiciando algunos, se extraviaron de la fe y fueron traspasados de muchos dolores, porque quienes quieren enriquecerse caen en tentación y lazo y en muchas codicias necias y dañinas que unen a los hombres en destrucción y perdición. Por eso Pablo exhortó a Timoteo a huir de estas cosas y seguir la justicia, la piedad, la fe, el amor, la paciencia y la mansedumbre (1 Timoteo 6:9-11). Pero gran ganancia es el corazón piadoso acompañado de contentamiento, porque nada hemos traído a este mundo y sin duda nada podremos llevarnos. Así que teniendo sustento y abrigo, estemos contentos con esto (1 Timoteo 6:6-8 ). *Jesús nos invita a hacernos tesoros en los cielos (ganar almas para Su Reino), donde la polilla no puede corromper las riquezas y donde los ladrones tampoco pueden hurtarlas. Porque donde esté nuestro tesoro, ahí también estará nuestro corazón. Cristo te ama y quiere entrar a tu vida para ser tu Rey y Señor (Romanos 10:8-13). Cristo en nosotros nuestra esperanza de gloria y nuestra victoria que por Su amor y gracia nos permite predicar el Evangelio para cambiar el mundo (Colosenses 1:26-27, 1 Corintios 15:10,57, Mateo 28:19-20, Juan 15:12-13). Aleluya.

Jesús y el ayuno

Cuando ayunéis, no seáis austeros, como los hipócritas; porque ellos demudan sus rostros para mostrar a los hombres que ayunan; de cierto os digo que ya tienen su recompensa. Pero tú, cuando ayunes, unge tu cabeza y lava tu rostro, para no mostrar a los hombres que ayunas, sino a tu Padre que está en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público.
Mateo 6:16-18 (RVR1960)

Cambiador del Mundo: Cuando el Señor nos manda a ayunar, normalmente lo hará de una manera privada y ahí es cuando cada persona deberá hacerlo de manera discreta y sin anunciar que está ayunando, porque Dios quiere que lo hagamos de manera íntima con Él. En estos versículos del Nuevo Testamento, Jesús estaba enseñando y a la vez corrigiendo a los fariseos que eran según la Biblia hipócritas, porque cambiaban su expresión como si fueran víctimas y eso no agrada a nuestro Creador. Dios quiere que cuando ayunemos, tengamos un rostro lleno de gozo para que no seamos de tropiezo a nadie y no mostrar a los hombres que ayunamos. Pero el Padre que está en lo secreto y que ve todas las cosas, Él recompensará en público a todo aquel que le ofrezca un ayuno. Moisés ayunó cuarenta días al igual que Cristo y muchas oraciones fueron respondidas, además de la fortaleza espiritual que se derramó en ellos. *En el caso de Jesús, El pasó un momento de ataque espiritual al ser tentado precisamente con comida, pero salió victorioso porque Él estaba lleno del Espíritu Santo. Eso mismo acontecerá con todos aquellos que hagan un ayuno dirigido por el Espíritu de Dios, con el fin de escuchar de manera más clara la voz del Señor, aclarando que ninguno de estos ayunos se debe de hacer por motivos egoístas. Cristo te ama y está tocando la puerta de tu corazón (Romanos 10:8-13). Cristo en nosotros nuestra esperanza de gloria y nuestra victoria que por Su amor y gracia nos permite cambiar el mundo (Colosenses 1:26-27, 1 Corintios 15:10, 57, Mateo 28:19-20, Juan 15:12-13). Aleluya.

La importancia de perdonar

Porque si perdonáis a los hombres sus ofensas, os perdonará también a vosotros vuestro Padre celestial; más si no perdonáis a los hombres sus ofensas, tampoco vuestro Padre os perdonará vuestras ofensas.
Mateo 6:14-15 (RVR1960)

Cambiador del Mundo: Una y otra vez, Jesús nos exhorta a perdonar a nuestro prójimo todas sus ofensas, ya que es la única manera de que nuestro Padre Celestial, nos perdone también a nosotros todas nuestras ofensas. Pero si no perdonamos a todos los que nos han ofendido, tampoco nuestro Padre, nos perdonará todas nuestras ofensas. El acto de perdonar, es un regalo de Dios que le otorga a todos aquellos que han recibido a Jesús como su Señor y Salvador, y que ahora caminan como cristianos nacidos de nuevo, que se le alimentan de las Escrituras (La Biblia) y que han creído que las promesas de Dios se cumplirán en sus vidas día a día. En lo natural toda la humanidad está viviendo con una naturaleza caída heredada de Adán y Eva a partir de su pecado en el huerto. Inclusive podemos leer que desde su separación con Dios, su hijo Caín se llenó de celos y amargura por la ofrenda a Dios de su hermano Abel, y esto provocó que el hermano mayor matara al hermano menor. *Antes de que Cristo entre a un corazón para ser el Rey y Señor, estamos contaminados de esos sentimientos aunque muchas veces no lo admitamos, pero esa es la obra que el Espíritu Santo hace en un verdadero cristiano, purificar su espíritu y ponerle un corazón nuevo que le permita perdonar y amar a su prójimo como Jesús lo hizo, aun en su momento más difícil y de mayor dolor, que fue en la cruz del calvario, donde Él dijo: perdónalos Padre porque no saben lo que hacen (Ezequiel 36:26-27, Lucas 23:34). Jesús te ama y Él es nuestra esperanza de gloria y nuestra victoria que por Su amor y gracia nos permite predicar Su Evangelio para cambiar el mundo (Colosenses 1:26-27, 1 Corintios 15:10,57, Mateo 28:19-20, Juan 15:12-13). Aleluya.

Discreción en nuestra generosidad

Cuando, pues, des limosna, no hagas tocar trompeta delante de ti, como hacen los hipócritas en las sinagogas y en las calles, para ser alabados por los hombres; de cierto os digo que ya tienen su recompensa. Más cuando tú des limosna, no sepa tu izquierda lo que hace tu derecha, para que sea tu limosna en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público.
Mateo 6:2-4 (RVR1960)

Cambiador del Mundo: Nuestro Señor Jesucristo es el que nos está hablando en estos versículos y dándonos una exhortación directa de no publicar nuestra generosidad y ayuda a otras personas, porque a los fariseos que lo hacían los llamó hipócritas, que significa ser alguien con una máscara para aparentar y representar a otra persona, exagerando su voz al hablar. La hipocresía esconde sus intenciones debajo de un disfraz que oculta la verdadera personalidad y corazón de la persona que la practica por ejemplo: una falsa generosidad, o falsa humildad o falsa preocupación por el prójimo y actúan de esta manera por una necesidad de ser reconocidos y aplaudidos por el mundo, pero el corazón con hipocresía, está muy lejos de Dios. A lo largo de su ministerio aquí en la tierra, el Señor dejó infinitas enseñanzas de cómo amar, servir y derramar nuestra vida por el Evangelio, caminando la milla extra, dándole al que no te puede devolver, entregando nuestra túnica y nuestra capa y nunca rehusar a socorrer a quien necesite algo de nosotros si podemos hacerlo. *Por eso necesitamos que Cristo viva en nuestros corazones, para que también nos llene de Su Espíritu Santo y seamos aquellos que den su vida por su prójimo, porque así lo enseñó Jesús: el verdadero amor es dar nuestra vida por los amigos (Juan 15:12-13). Cristo te ama y quiere hacer esta obra en tu vida (Romanos 10:8-13). Cristo en nosotros nuestra esperanza de gloria y nuestra victoria que por Su amor y gracia cambia el mundo (Colosenses 1:26-27, 1 Corintios 15:10, 57, Mateo 28:19-20). Aleluya. *Promesa.

Jesús nuestra justicia

Guardaos de hacer vuestra justicia delante de los hombres, para ser vistos de ellos; de otra manera no tendréis recompensa de vuestro Padre que está en los cielos.
Mateo 6:1 (RVR1960)

Cambiador del Mundo: Solamente Jesús es el que puede justificarnos, salvarnos y darnos vida eterna, para eso vino a la tierra y dio Su vida en la cruz del calvario. En esa época cuando nuestro Señor Jesucristo predicaba, la mayoría de los fariseos intentaba lucir como personas buenas y puras delante de los hombres, para ser vistos por ellos, pero Jesús los reprendía y les enseñaba que solo hay un camino al Padre y es precisamente creer en Él. La reacción de los fariseos era de enojo y de persecución al Hijo de Dios, porque no creían que era el Mesías y tampoco en lo que hablaba. A los fariseos les gustaba pararse en las plazas y hablar cosas de la Ley y proclamarse superiores a todo el pueblo que los escuchaba. Jesús en cambio hablaba de que nos guardáramos de los falsos Profetas que se disfrazan con vestidos de ovejas, pero por dentro son lobos rapaces. Por sus frutos reconoceremos quiénes son los verdaderos siervos de Dios, porque todo buen árbol, da buenos frutos, y el árbol malo, da malos frutos y nunca podrá el buen árbol, dar malos frutos y el árbol malo tampoco dará buenos frutos (Mateo 7:15-18). *La promesa para estar seguros de que estamos caminando en la justicia de Dios, es entrar por la puerta estrecha que es Cristo, porque ancha es la puerta y espacioso el camino que lleva a la perdición, y tristemente muchos son los que entran por ella. Pero los que entramos por la puerta estrecha y tomamos el camino angosto, éste es el que nos llevará a la vida eterna, aunque pocos son los que la hallan (Mateo 7:13-14). Cristo te ama, hoy es tu día de rendirte a Él (Romanos 10:8-13. Cristo en nosotros nuestra esperanza de gloria y nuestra victoria que por Su amor y gracia, nos permite predicar Su Palabra para cambiar el mundo (Colosenses 1:26-27, 1 Corintios 15:10, 57, Mateo 28:19-20, Juan 15:12-13). Aleluya.