La persecución a verdaderos cristianos

Y guardaos de los hombres, porque os entregarán a los concilios, y en sus sinagogas os azotarán; y aun ante gobernadores y reyes seréis llevados por causa de mí, para testimonio a ellos y a los gentiles. Más cuando os entreguen, no os preocupéis por cómo o qué hablaréis; porque en aquella hora os será dado lo que habéis de hablar. Porque no sois vosotros los que habláis, sino el Espíritu de vuestro Padre que habla en vosotros.

Mateo 10:17-20 (RVR1960)

Cambiador del Mundo: En esa época Jesús les estaba advirtiendo a Sus discípulos todas las cosas que les sobre vendrían por predicar Su Evangelio, y obviamente el propósito de decirle estas cosas era para que se prepararan para no tener miedo y con valor cumplieran el propósito en todas partes anunciando las buenas nuevas de Jesús. Dos mil años después al día de hoy, Jesús nos sigue hablando de la misma manera y nos está exhortando a los cristianos nacidos de nuevo, que también caminemos por encima de nuestros temores y prediquemos hasta el último lugar de la tierra la Palabra de Dios. Pues Jesús profetizó no solamente para esa época sino para el final de los tiempos que es lo que ahora nosotros estamos viviendo. Cada vez que se levanta la tiniebla a querer intimidar a los cristianos, provoca que el poder de Dios se manifieste de manera muy especial en todos los que amamos a Jesús y que estamos llevando Su Palabra día con día (Colosenses 1:19-23). *Creerle a Jesús sabiendo que estamos guardados por el poder del Espíritu Santo, nos hará vasos de barro útiles en Su propósito de ganar almas para Su Reino (2 Corintios 4:7). Cristo te ama y quiere salvarte y enviarte a predicar Su Palabra, hoy es el día (Romanos 10:8-13). Cristo en nosotros nuestra esperanza de gloria y nuestra victoria que por Su amor y gracia nos permite predicar su Evangelio y cambiar el mundo (Colosenses 1:26-27, 1 Corintios 15:10, 57, Mateo 28:19-20, Juan 15:12-13). Aleluya.

Persecuciones a los discípulos de Cristo

He aquí, yo os envío como a ovejas en medio de lobos; sed, pues, prudentes como serpientes, y sencillos como palomas.
Mateo 10:16 (RVR1960)

Cambiador del Mundo: Un verdadero siervo de Dios que ha nacido de nuevo del agua y del Espíritu, tendrá que atravesar por estas pruebas y pedir fortaleza a Dios para que su fe no decaiga. El mundo está abrazando el engaño y las tinieblas y por lo tanto está renuente a querer escuchar del Evangelio de Cristo y prefieren sacar sus propios consejos que son totalmente opuestos a la Palabra santa y perfecta de Dios. A Jesús nada de esto le sorprende porque Él sabía que estos tiempos llegarían, como ahora está sucediendo. A los verdaderos cristianos no se les recibiría ni oirían sus palabras en muchos lugares a los que acudieren a predicar y por eso el Señor dijo que sería más tolerable el castigo para la tierra de Sodoma y Gomorra que para aquella ciudad o nación (Mateo 10:14-15). *Cuando una persona está totalmente cansada de vivir en el engaño del pecado, es que dobla sus rodillas y se entrega a Jesús, pero tiene que suceder que aborrezca su vida pasada, se arrepienta y le confiese todos sus pecados al Señor. Esta convicción que siente y se le revela a un pecador, también es un regalo de parte del Espíritu Santo de Dios, porque Él es el que nos da convicción de pecado y de toda obra mala y también es el que pone en nosotros el querer como el hacer por Su buena voluntad (Juan 16:8-11, Filipenses 2:13-15). Cristo te ama y hoy es tu día de salvación, si te rindes a Él (Romanos 10:8-13). Cristo en nosotros nuestra esperanza de gloria y nuestra victoria que por Su amor y gracia nos permite predicar el Evangelio para cambiar el mundo (Colosenses 1:26-27, 1 Corintios 15:10, 57, Mateo 28:19-20, Juan 15:12-13). Aleluya.

La fe de los discípulos de Cristo

No os proveáis de oro, ni plata, ni cobre en vuestros cintos; ni de alforja para el camino, ni de dos túnicas, ni de calzado, ni de bordón; porque el obrero es digno de su alimento. Más en cualquier ciudad o aldea donde entréis, informaos quién en ella sea digno, y posad allí hasta que salgáis.
Mateo 10:9-11 (RVR1960)

Cambiador del Mundo: El Señor nos está enseñando que cuando empezaron a evangelizar, Él mandó a Sus discípulos a no proveerse de sustento para el camino, ni siquiera de demasiada ropa porque el obrero es digno de su alimento dijo Jesús. Además les mandó a quedarse específicamente en lugares dignos y que permanecieran ahí hasta que partieran de esa población. Jesús sabía que no iba a ser fácil para ellos caminar en esta fe tan grande, sobre todo porque normalmente se cruzaban por sus caminos algunos fariseos que intentaban desprestigiar a los discípulos y muchas veces provocaban al pueblo para fueran apedreados. Jesús también les decía que la casa que fuera digna y los recibiere, la paz de Dios vendría sobre ella, pero si no fuere digna la paz le sería quitada. Si alguno no los recibía ni tampoco escuchaba la Palabra, Jesús les mandó salir de esa casa o ciudad y sacudir el polvo de sus pies (Mateo 10:13-15). En el día del juicio su castigo sería grande para esa ciudad. *Pidámosle a Dios discernimiento para poder recibir Su Palabra y para que Su Espíritu Santo la vuelva vida en nuestra vida, a fin de que demos frutos apacibles de justicia y tengamos el aroma de Cristo. Cristo te ama y también quiere entrar a tu corazón para salvarte (Romanos 10:8-13). Cristo en nosotros nuestra esperanza de gloria y nuestra victoria que por Su amor y gracia nos permite predicar el Evangelio (Colosenses 1:26-27, 1 Corintios 15:10, 57, Mateo 28:19-20, Juan 15:12-13). Aleluya.

Misión de los Apóstoles

A estos doce envió Jesús, y les dio instrucciones, diciendo: Por camino de gentiles no vayáis, y en ciudad de samaritanos no entréis, sino id antes a las ovejas perdidas de la casa de Israel. Y yendo, predicad, diciendo: El reino de los cielos se ha acercado. Sanad enfermos, limpiad leprosos, resucitad muertos, echad fuera demonios; de gracia recibisteis, dad de gracia.

Mateo 10:5-8 (RVR1960)

Cambiador del Mundo: Jesús envió a Sus doce discípulos con instrucciones precisas de no ir por camino de gentiles, ni tampoco de samaritanos, sino que antes fueran a las ovejas perdidas de la casa de Israel. Y eso fue exactamente lo que ellos hicieron, y empezaron a anunciar que el Reino de los Cielos se había acercado. Tenían la misma unción que nuestro Señor Jesucristo y podían sanar enfermos, aun leprosos, y sobre todo resucitar muertos, y enseñaban a la gente a dar de gracia todos lo que ellos estaban recibiendo por gracia. Gracias a Dios porque ahora el Evangelio se predica a toda criatura y no solamente al pueblo de Israel como se hizo en el principio, y por eso mismo cada uno de nosotros debe revisar hoy su vida y confesarle a Jesús todos sus pecados, teniendo un arrepentimiento genuino para que pueda ser perdonado y reciba la promesa del perdón y de la vida eterna. *Cada uno de nosotros ha tenido su momento preciso en el que seguramente Dios ha tocado a la puerta de su vida, si ese día alguien abrió, con toda seguridad está disfrutando de su relación como hijo de Dios. Pero si todavía no te has decidido abrir tu corazón, hoy es el día para que lo hagas y puedas recibir perdón y salvación si te arrepientes y le confiesas a Jesús tus pecados (Romanos 10:8-13). Cristo en nosotros nuestra esperanza de gloria y nuestra victoria que por Su amor y gracia nos permite predicar el Evangelio y cambiar el mundo (Colosenses 1:26-27, 1 Corintios 15:10, 57, Mateo 28:19-20, Juan 15:12-13). Aleluya.
*Promesa.

La compasión de Jesús por nosotros

Y al ver las multitudes, tuvo compasión de ellas; porque estaban desamparadas y dispersas como ovejas que no tienen pastor. Entonces dijo a sus discípulos: A la verdad la mies es mucha, más los obreros pocos. Rogad, pues, al Señor de la mies, que envíe obreros a su mies.
Mateo 9:36-38 (RVR1960)

Cambiador del Mundo: En estas escrituras, vemos el corazón de Jesús, cómo al ver las multitudes sin Dios, tuvo compasión como hasta el día de hoy sigue sucediendo. Él pudo reconocer que eran pueblos desamparados y dispersos como ovejas sin pastor, por lo que dijo a Sus discípulos que el trabajo era mucho pero los obreros muy pocos, por eso pidió que oraran para que Dios enviara más obreros a sus campos. En nada ha cambiado al día de hoy esta situación, e inclusive vemos mucha más gente extraviada de los caminos de Dios y por supuesto de Su santidad. Lo peor es que muchos creen que están bien y que no es necesario ser cristianos nacidos de nuevo. Pero eso es totalmente contrario a lo que nos enseña la Biblia, porque el único Camino para salvación y perdón de todos nuestros pecados, es creer en nuestro Señor Jesucristo y recibirlo a Él como nuestro Señor y Salvador. Entendamos que no tenemos que ser necesariamente Pastores para poder llevar almas al Reino de los cielos, porque lo importante es compartir nuestro testimonio de vida enseñando la forma en la que Cristo nos rescató. *Predicar la Palabra de Dios nos hará obreros que multiplicaron sus dones y talentos ganando vidas para la gloria de Dios (Mateo 25:14-30). Cristo te ama y quiere salvarte junto con tu familia si tan solo puedes recibirlo en tu corazón como tu Rey y Señor (Romanos 10:8-13). Cristo en nosotros nuestra esperanza de gloria y nuestra victoria que por Su amor y gracia nos permite predicar el Evangelio para cambiar el mundo (Colosenses 1:26-27, 1 Corintios 15:10, 57, Mateo 28:19-20, Juan 15:12-13). Aleluya.

Jesús sana la ceguera

Pasando Jesús de allí, le siguieron dos ciegos, dando voces y diciendo: ¡Ten misericordia de nosotros, Hijo de David! Y llegado a la casa, vinieron a él los ciegos; y Jesús les dijo: ¿Creéis que puedo hacer esto? Ellos dijeron: Sí, Señor. Entonces les tocó los ojos, diciendo: Conforme a vuestra fe os sea hecho. Y los ojos de ellos fueron abiertos. Y Jesús les encargó rigurosamente, diciendo: Mirad que nadie lo sepa. Mateo 9:27-30 (RVR1960)

Cambiador del Mundo: La ceguera física de la que nos habla esta historia fue sanada por Jesús en dos hombres ciegos que dando voces le suplicaban que los sanara. Jesús les preguntó si ellos creían que Él podía hacer esto y ellos respondieron sí Señor. Al igual que la ceguera física, existe una ceguera espiritual de la que padecemos todos los seres humanos antes de recibir a Jesús en nuestro corazón y declararlo nuestro Rey y Señor. El Apóstol Pablo nos habla de esto en su segunda carta a los Corintios y nos señala que nuestro evangelio está encubierto en aquellos que están perdidos y por supuesto lejos de Dios a los cuales el dios de este siglo (el enemigo de sus almas) cegó el entendimiento de todos ellos los incrédulos, para que nos les resplandezca la luz del Evangelio de la gloria de Cristo, el cual es la imagen de Dios. Porque Dios que mandó que de las tinieblas resplandeciese la luz, es el que resplandeció en nuestros corazones para iluminación del conocimiento de Su gloria, a través de la vida de Jesucristo en nosotros (2 Corintios 4:1-6). *Toda persona necesita a Dios para que pueda resplandecer la luz del Evangelio en su vida y en sus generaciones. Cristo te ama y quiere entrar a tu corazón para que puedas salir de las tinieblas (Romanos 10:8-13). Cristo en nosotros nuestra esperanza de gloria y nuestra victoria que por Su amor y gracia nos permite predicar el Evangelio para cambiar el mundo (Colosenses 1:26-27, 1 Corintios 15:10, 57, Mateo 28:19-20, Juan 15:12-13). Aleluya.

Jesús siempre predicando

Recorría Jesús todas las ciudades y aldeas, enseñando en las sinagogas de ellos, y predicando el evangelio del reino, y sanando toda enfermedad y toda dolencia en el pueblo.
Mateo 9:35 (RVR1960)

Cambiador del Mundo: Jesús no paraba de recorrer todas las ciudades y mientras Él iba de aldea en aldea, le traían gente con diversas enfermedades, entre ellos mudos atados espiritualmente, sordos, ciegos, lunáticos, paralíticos, y Él los sanaba a todos. Los ciegos veían, los mudos hablaban y la gente se maravillaba, y decían que nunca se había visto cosa semejante en Israel. Pero los fariseos decían que Jesús hacía todo esto por el príncipe de las tinieblas, ya que el celo que tenían de El los consumía, y su legalismo les impedía recibir el Espíritu Santo para discernir que Jesús era el Hijo de Dios. La labor de Jesús de predicar y ganar almas para Su Reino, fue incansable durante Sus tres años y medio de ministerio y muchos creyeron en Él, pues tenía compasión por todos. Este mensaje tiene que servirnos a todos los cristianos que hemos nacido de nuevo, como nuestra inspiración para que prediquemos sin cesar el Evangelio de nuestro Señor Jesucristo, porque los días son cortos y los tiempos y las sazones se han estado cumpliendo como nunca antes. Aun al día de hoy muchas personas no han escuchado que Jesús es el único Camino, la Verdad y la Vida para recibir perdón y regresar a Dios Padre. *Dios promete a todo aquel que venga a Sus brazos, darle descanso y poner Su humildad y mansedumbre en el corazón de ellos (Mateo 11:28-30). Cristo te ama y quiere salvarte si pones en primer lugar el Reino de Dios y Su justicia (Romanos 10:8-13, Mateo 6:33). Cristo en nosotros nuestra esperanza de gloria y nuestra victoria que por Su amor y gracia nos permite predicar Su Evangelio para cambiar el mundo (Colosenses 1:26-27, 1 Corintios 15:10, 57, Mateo 28:19-20, Juan 15:12-13) Aleluya.

Los milagros de Jesús

Mientras él les decía estas cosas, vino un hombre principal y se postró ante él, diciendo: Mi hija acaba de morir; más ven y pon tu mano sobre ella, y vivirá. Y se levantó Jesús, y le siguió con sus discípulos. Mateo 9:18-19 (RVR1960)

Cambiador del Mundo: El amor de Jesús es inagotable y aquí podemos verlo y entenderlo, ya que nunca se negaba a sanar a quien se lo pedía. En el camino a casa de este hombre principal, encontró arrastrándose en el suelo a una mujer enferma de flujo de sangre desde hacía doce años, la cual se le acercó por detrás a Jesús y tocó el borde de Su manto; porque ella decía: si tocare solamente Su manto seré salva. Volviéndose Jesús y mirándola le dijo: ten ánimo hija tu fe te ha salvado y la mujer fue sana y salva dese aquella hora. Al llegar Jesús a la casa del principal vio gente que tocaban flautas y que hacían alboroto y Él les dijo: apartaos porque la niña no está muerta sino duerme. Y se burlaban de Él. Pero cuando la gente salió de la habitación, El entró y tomó la mano de la niña y ella de inmediato se levantó. Y se difundió la fama de este milagro por todo el lugar. *De la misma manera sucedió con todos nosotros los cristianos que hemos nacido de nuevo desde el día que confesamos a Jesús como nuestro Señor y Salvador, porque a partir de ese momento Él nos perdonó, nos sanó, nos limpió de todo pecado y nos dio vida nueva (Romanos 6:1-14). Cristo quiere hacer lo mismo con tu vida no importa cuál es tu condición el día de hoy. Abre tu corazón y déjalo entrar para que Él se glorifique en ti (Romanos 10:8-13). Cristo en nosotros nuestra esperanza de gloria y nuestra victoria que por Su amor y gracia nos permite predicar el Evangelio para cambiar el mundo (Colosenses 1:26-27, 1 Corintios 15:10, 57, Mateo 28:19-20, Juan 15:12-13). Aleluya.

La vida antigua y la vida nueva

Nadie pone remiendo de paño nuevo en vestido viejo; porque tal remiendo tira del vestido, y se hace peor la rotura. Ni echan vino nuevo en odres viejos; de otra manera los odres se rompen, y el vino se derrama, y los odres se pierden; pero echan el vino nuevo en odres nuevos, y lo uno y lo otro se conservan juntamente.

Mateo 9:16-17 (RVR1960)

Cambiador del Mundo: El cristianismo no permite mezclar el mundo y su pecado con la iglesia y la santidad, a menos que sea por causa de predicar el Evangelio y estar incansablemente siendo la luz y la sal de la tierra. La Iglesia tiene que salir a cambiar el mundo y no permitir que el mundo entre a cambiar la Iglesia, como en la actualidad tristemente está sucediendo. Jesús está enseñando que la vida vieja y su pecado, Él la lanzó al fondo del mar y no la traerá más a memoria, porque todo lo pasado tiene que quedar olvidado (Miqueas 7:19, 2 Corintios 5:17). La tela de un vestido viejo no resistirá la presión de un paño nuevo, porque al intentar costurarlo y mezclarlo con lo antiguo, será peor la rotura. Dándonos a entender lo que el Apóstol Pedro dijo, que es mejor no haber conocido la verdad del Evangelio, que después de hacerlo volvamos atrás ( 2 Pedro 2:20-21). Lo mismo sucede con los odres nuevos y viejos, el vino nuevo no se podrá almacenar o guardar en un odre viejo, porque se romperá y se desperdiciará ese vino. *Por lo tanto nosotros tenemos que ser odres nuevos para que Dios derrame Su Espíritu Santo en nuestra vida y podamos dar fruto bueno de amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre y templanza (Gálatas 5:22). Cristo te ama y quiere entrar a tu vida para hacer una obra en ti (Romanos 10:8-13). Cristo en nosotros nuestra esperanza de gloria y nuestra victoria que por Su amor y gracia nos permite predicar el Evangelio para cambiar el mundo (Colosenses 1:26-27, 1 Corintios 15:10, 57, Mateo 28:19-20, Juan 15:12-13). Aleluya.

Cuando Jesús nos llama

Pasando Jesús de allí, vio a un hombre llamado Mateo, que estaba sentado al banco de los tributos públicos, y le dijo: Sígueme. Y se levantó y le siguió. Mateo 9:9 (RVR1960)

Cambiador del Mundo: Mateo era un importante cobrador de impuestos públicos y pasando Jesús ese día por ahí, le dijo que le siguiera, y sin ningún argumento éste hombre le siguió. Esa misma tarde Mateo hizo una fiesta en su casa donde invitó a Jesús y muchos de sus amigos publicanos y pecadores fueron invitados a esa reunión y se sentaron a la mesa juntamente con Jesús y Sus discípulos. Por supuesto que cuando vieron esto los fariseos le preguntaron a los discípulos el por qué el Maestro refiriéndose a Jesús, estaba sentado en esa misma mesa con los pecadores. Al oír esto Jesús, les contestó que los sanos no tienen necesidad de médico sino los enfermos, y era necesario que aprendieran el significado de que Dios quería misericordia y no sacrificio. Porque Jesús no vino a llamar a justos sino a los pecadores para arrepentimiento (Mateo 9:10-13). Como cristianos nacidos de nuevo, estemos atentos a esta enseñanza de Jesús para que no la saquemos de contexto y pensemos que hay que estar de fiesta en fiesta con gente que no quiere saber de Dios, pero que la justificamos diciendo que les vamos a ir a predicar y otra vez. *Al igual que Mateo cada uno de nosotros debemos seguir a Jesús inmediatamente a partir del momento en que Él nos llama, para que le podamos servir y ser Su instrumento de amor y gracia para ser bendición a muchas personas que están perdidas. Servir a los planes de Dios es el más poderoso llamado que un cristiano puede recibir para llevar muchas almas al conocimiento de la Palabra de Dios y a la vida eterna. Cristo te ama y quiere entrar a tu vida (Romanos 10:8-13). Cristo en nosotros nuestra esperanza de gloria y nuestra victoria que por Su amor y gracia nos permite predicar el Evangelio para cambiar el mundo (Colosenses 1:26-27, 1 Corintios 15:10, 57, Mateo 28:19-20, Juan 15:12-13). Aleluya.