La Biblia como pilar fundamental

“Las armas con que luchamos no son del mundo, sino que tienen el poder divino para derribar fortalezas” (2 Corintios 10:4).

 

El temor no es cosa insignificante para el que lo tiene. Satanás usa el espíritu de temor y lo disfraza en forma de palabras más aceptables como la duda, la ansiedad, la indecisión y el sobresalto. Pero de ahí el temor toma proporciones monstruosas.

 

Sin embargo, La Biblia dice que no debemos ignorar los artificios de Satanás, porque las armas de nuestra lucha no son carnales sino poderosas en Dios para derribar fortalezas.

 

Aquí vamos a hablar de varias de esas armas. Pero hay una poderosa que sobresale de todas las otras en su lucha contra el enemigo que es el temor. El arma que puede vencer total y permanentemente al temor es una fe robusta y atrevida en La Palabra de Dios. “Tomen el escudo de la fe, con el cual pueden apagar todas las flechas encendidas del maligno” (Efesios 6:16). La fe basada en La Palabra de Dios es indestructible e irresistible.

 

La Palabra

 

Quiero mostrarle el arma invencible de Dios que es La Palabra, tan viva y eficaz. Quiero que usted vea que para cada temor forjado por artificio satánico Dios tiene una respuesta en su palabra. Crea lo que Dios dice, concuerde con lo que le dice La Palabra y se pondrá en camino a la liberación del temor.

 

¿Teme usted ser incapaz? Los “no puedo” abundan. Así hablan: “No puedo ser testigo de Cristo. No puedo vivir una vida victoriosa. No puedo dormir de noche. No puedo pagar mis cuentas”. Y así por el estilo, profesando sus incapacidades. ¿Cómo se vence el temor a la incapacidad? Afirmando lo que dice Filipenses 4:13: “Todo lo puedo en Cristo que me fortalece”. Todo lo que el Señor quiere que usted haga lo hará con la habilidad y la fortaleza que Él le da.

 

¿Quiere el Señor que usted le escriba una carta a alguien tocante a su salvación? Entonces el Señor le dará la habilidad de escribir esa carta con eficacia, vibrante con el poder convincente del Espíritu Santo.

 

¿Quiere el Señor que usted ore por alguien que está enfermo? Entonces el Señor le proporcionará la habilidad divina para que usted ponga en confianza sus manos sobre la persona enferma y pueda esperar resultados positivos en el nombre de Jesús.

 

¿Le está dirigiendo al Señor a orar por la liberación de alguien que esté poseído por demonios? ¡Entonces, por dotación sobrenatural, podrá usted hablar las palabras de liberación en el nombre de Jesús!

 

¿Teme usted ser débil? Dios le promete fortaleza de mi vida: “¿a quién temeré?” (Salmo 27:1). Dígalo con valor. “El gozo del Señor es nuestra fortaleza” (Nehemías 8:10). Ahora mismo sea como Pablo que mandó a los creyentes de Éfeso a que se “fortalézcanse con el gran poder del Señor” (Efesios 6:10).

 

Diga las palabras de Dios

 

“Que diga el cobarde:
‘¡Soy un valiente!’” (Joel 3:10). No importa mi propia opinión, “¡Soy un valiente!”. A pesar de los demás, “¡Soy un valiente!”. Cuando más débil me siento “¡Soy un valiente!”. A pesar de las experiencias del pasado, “¡Soy un valiente!”. No solo cuando soy valiente digo que soy valiente. Cuando esté débil he de decir: “¡Soy un valiente!”. Dios me manda que diga: “¡Soy un valiente!”. Dondequiera que esté, “¡Soy un valiente!”. Quienquiera que sea, “¡Soy un valiente!”. Así habla la fe.

 

¿Teme usted a la inseguridad? El temor a la inseguridad es uno de los artificios más sutiles que usa Satanás contra el cristiano para arrebatarles la victoria. Él atormenta a los padres jóvenes con el temor a la inseguridad de que sean capaces de proveer para su familia. Él perturba a los cristianos acianos con el temor a la inseguridad en los últimos años de su vida. Él infunde temor e inseguridad en el corazón de los que están endeudados, atormentándolos con pensamientos de que van a meterse en más deudas y en más inseguridad.

 

¿Cómo puede verse usted libre de este temor a la inseguridad? ¡Creyendo lo que dice La Biblia! ¡Confesando La Palabra de Dios! “Así que mi Dios les proveerá de todo lo que necesiten, conforme a las gloriosas riquezas que tiene en Cristo Jesús” (Filipenses 4:19).

 

¿Le teme usted a las diversas enfermedades? Este es uno de los temores prominentes que atormentan a muchísimas personas. Sin embargo, la expresa voluntad de Dios nos dice en Hechos 10:38: “Me refiero a Jesús de Nazaret: cómo lo ungió Dios con el Espíritu Santo y con poder, y cómo anduvo haciendo el bien y sanando a todos los que estaban oprimidos por el diablo”. Este mismo Jesús sigue hoy sanando a los oprimidos por el diablo en su cuerpo. “Él cargó con nuestras enfermedades
y soportó nuestros dolores” (Mateo 8:17). Cuando usted crea de corazón que Jesús llevó sus enfermedades en su propio cuerpo y proveyó la sanidad a través de su sacrificio, usted no tendrá temor de la enfermedad y la dolencia.  “Gracias a sus heridas fuimos sanados”(Isaías 53:5). Jesús vino a quitar de nosotros lo que el diablo había puesto. David fue testigo de Dios en esto: “Él perdona todos tus pecados
y sana todas tus dolencias” (Salmo 103:3).

 

¿Le teme usted a la muerte? Fuera de Jesucristo, la muerte es verdaderamente un enemigo que hay que temer. La Biblia dice: “él también compartió esa naturaleza humana para anular, mediante la muerte, al que tiene el dominio de la muerte —es decir, al diablo—, y librar a todos los que por temor a la muerte estaban sometidos a esclavitud durante toda la vida” (Hebreos 2:14-15). Jesús anuncia algo glorioso: “Yo soy la resurrección y la vida. El que cree en mí vivirá, aunque muera; y todo el que vive y cree en mí no morirá jamás” (Juan 11:25-26).

 

A la luz de La Palabra de Dios, usted no tiene que seguir siendo víctima del temor. Adéntrese en La Palabra y deje que penetre en usted.

 

Satanás no puede resistirla. Fue ella lo que Jesús usó tan eficazmente cuando fue tan severamente tentado por el diablo. La Palabra dice: “el que está en ustedes es más poderoso que el que está en el mundo” (1 Juan 4:4). El temor es de Satanás. El poder, el amor, el dominio propio, la fortaleza y el arrojo son de Dios. Diga con David: “Busqué al Señor, y él me respondió;
me libró de todos mis temores” (Salmo 34:4).

 

La fe activa el poder de Dios

En nuestros hogares, todos acostumbramos a encender los equipos electrodomésticos, sin que nadie nos pregunte quiénes somos o con qué derecho usamos la energía. Espiritualmente ocurre de la misma manera: el poder, las bendiciones y las promesas de Dios se encuentran a la disposición de todos sin establecer diferencias de ninguna clase. Lo único que se necesita para alcanzarlos es la fe.

 

Una mujer fue sanada de un flujo de sangre al tocar a Cristo en secreto. Él no sabía quién le había tocado, pero cuando ella lo admitió, Jesús le dijo: “Tu fe te ha salvado”. Su sanidad se encuentra disponible a todo aquel que realice el contacto de fe. Pedro, aun después de haber tratado con Jesús durante tres años, aprendió que el contrato de Dios con la raza humana contiene una gloriosa cláusula  que no discrimina a nadie. Conoció a un soldado romano y a otros que venían con él, fuera del territorio de Israel, y supo que Dios había contestado sus oraciones, lo cual dejó a Pedro asombrado, siendo él un judío estricto, y dijo: “Ahora comprendo que en realidad para Dios no hay favoritismos, sino que en toda nación él ve con agrado a los que le temen y actúan con justicia” (Hechos 10:34-35). En esto consiste el maravilloso carácter de la fe cristiana y del Señor, quien no hace acepción de personas. El Evangelio recibe y abraza a todo el que lo desee.

 

La fe constituye el pasaporte, la visa y la carta de entrada al Reino de Dios, los cuales no se obtienen mediante normas y reglas de alguna organización. Nadie tiene derecho a señorear sobre los cristianos y hacerles entrar hacia las bendiciones de Dios por una pequeña puerta de su propiedad, dictándoles cómo deben vivir sus vidas. Solamente la fe puede abrir la puerta, no una vida conformada según las ideas de algunas personas en cuanto a lo que es bueno o malo, ejerciendo el control opresivo, disfrazándolo como “protección y cuidado”. Cada uno de nosotros es responsable por su propia vida, y no podemos alabar o culpar a nadie por decirnos lo que teníamos que hacer.

 

Los grupos religiosos que requieren sumisión personal a un líder, no constituyen iglesias, sino sectas. Una iglesia contiene toda clase de personas de diferentes grados de progreso espiritual. La única presión debe ser la exhortación a someterse a La Palabra de Dios. Si los miembros de la iglesia comienzan a inclinarse ante las órdenes de un líder, no están haciendo otra cosa más que ir en pos del culto a la personalidad. Existe un gran peligro cuando se exalta a una persona por poseer una relación con Dios más estrecha de lo normal.Ni aún Cristo, el verdadero Maestro, interfirió en las simples decisiones de sus seguidores, sino que les permitió desarrollar sus propios asuntos conforme a la sabiduría humana. Cristo no dio órdenes, pues no era un dictador. No le dijo a nadie dónde debía vivir o trabajar, dónde debía ir, qué hacer con su dinero o sus propiedades, ni con quién debía casarse. Los discípulos servían a Cristo por amor, y harían cualquier cosa por Él, sin embargo, Él nunca presumió ni se aprovechó de ellos.

 

Cuando hablamos acerca de la fuente de energía, cualquiera puede conectarla, lo cual es cierto, pero en Cristo no somos cualquiera, sino que todos tenemos un valor, hasta el ladrón que colgaba en la cruz. Cristo nunca trató a las personas como “las masas”. Las compañías de electricidad en la Tierra nos tratan como anónimos, para ellos no somos más que consumidores desconocidos, pero conectarnos por fe a la fuente espiritual no constituye un vínculo a ciegas, sino que al acercarnos, todos somos reconocidos por nuestro nombre. Algunas personas hablan sobre el amor a la humanidad pero odian a su vecino. Jesús vino para salvar al mundo y amó aun a sus enemigos. Esto constituye una verdad simple que todos conocemos, pero quizás podemos ver algo especial en ella.

 

La Biblia hace énfasis en cambiar las naciones de todo el mundo, pero principalmente nos habla de la manera en que Dios trata con las personas, como Abraham, Jacob, José, Moisés, Davis, los reyes y profetas. Jesús no predicó sermones tan solo esperando que tuvieran un buen efecto general, Él escogió personas a quienes les encomendó las tareas necesarias. Los evangelios destacan a muchos de manera individual, aun sin mencionar sus nombres, convirtiéndose en personas imprescindibles para dar a conocer verdades espirituales.

 

Cuando creemos se produce un vivo contacto con un área vital de Dios. Existen áreas comunes, pero maravillosas en el corazón de Dios, como el perdón, la restauración y la salvación, pero cada persona establece un contacto que es único. Cada creyente conoce a Dios en una forma que nadie más lo hace, pues Dios es infinito y los aspectos de su naturaleza son interminable. Podemos conocerle a través de sus insondables profundidades, pero cada persona es diferente, y todos venimos de Dios, moldeados y conformados según su voluntad, especialmente por el nuevo nacimiento, pero “a su imagen”. Solo podemos conocer una pequeña parte de Dios, pues nos encontramos conectados solo con una minúscula porción de su naturaleza, la cual corresponde con la nuestra. En el océano de Dios existe un lugar privado para cada uno de nosotros y para nadie más.

 

Existe en cada uno una parte especial que solamente puede ser satisfecha cuando nos acercamos a Dios, quien llega hasta lo más profundo de nuestro corazón. Nunca debemos conformarnos con seguir otro camino, pues a Dios no lo podemos sustituir, ya que Él nos diseñó para que fuéramos dependientes de Él. Él es “mi Dios” para cada uno de nosotros. Cada persona posee una naturaleza diferente con pensamientos diferentes, pero Jehová es Dios para todos por igual.

 

Toda un área de la actividad de Dios comienza a funcionar cuando alguien comienza a creer, porque cada uno cree en Él de acuerdo a su propia experiencia. Cuando no creemos, falta un eslabón en la cadena de Dios. No somos extranjeros que necesitan una visa para entrar al Reino. El Señor no es un dios, o el Dios, ni aún el Dios de Abraham. Él es miDios, y se presenta a cada uno de nosotros como personas individuales. Cuando nos acercamos a Él con fe es como si llegáramos a nuestro hogar y nos hubieran estado esperando con todo listo para cuando comencemos a creer.

 

La Biblia no constituye otro libro histórico para recopilar eventos nacionales. Ella describe la forma en que Dios se ha relacionado con personas como David, Daniel, Natanael, Lázaro y Simón Pedro. No existe una relación con Cristo de manera común. Cada hombre y cada mujer establecen una relación especial con Él que nadie más puede disfrutar. Esto es a lo que llamamos una relación de fe, en la que cada quien cree en Dios de acuerdo a su propia experiencia, pero conforme al plan de Dios. No debemos tratar de ser otro Pablo, Wesley o Wigglesworth. Dios simplementenos pide que creamos, confiemos y dejemos guiarnos por Él. Y Él se encargará de todos los problemas, a nosotros nos corresponde seguir adelante.

 

Reyna y Danae, las ganadoras del concurso internacional Rejoice Music Talent, presentan su nueva canción Vive Él en Mí

Las hermanas Reyna y Danae, ganadoras del prestigioso concurso internacional de canto a nivel cristiano Rejoice Music Talent, lanzan el sencillo «Vive Él en mí» tema que se desprende de su más reciente proyecto musical titulado Pienso en Tí.

Ambas compusieron la letra y la música de esta hermosa canción con la ayuda de su padre, el señor Pablo Aguilar.  El tema exhorta a la confianza absoluta en Dios haciendo un llamado a todas las personas a tener fe en Jesús, quien hace que todas las cosas obren para bien.

El sencillo Vive Él en mí es un himno de fe que nos motiva a llenarnos de valentía para luchar a pesar de las circunstancias o el temor que podamos sentir. «Todos pasamos por tiempos de incertidumbres, pruebas y dificultades.  Momentos en donde te preguntas: ¿Dónde está Dios?, pero con esta canción queremos recordarte que Él no se ha olvidado de ti, que Él te dará las fuerzas y nuevas alas para seguir volando, y te conduce a una salida victoriosa», declaran Reyna y Danae, apoyándose en las Escrituras para transmitir esta verdad absoluta.

«‘El apóstol Pablo decía convencido: Pues ya no vivo yo, mas Cristo vive en mi (Gálatas 2:20)” y es exactamente el propósito de esta canción llevarte al convencimiento de que si Cristo vive en nosotros confiemos que con Él podemos afrontar cualquier situación», aseguran.

La producción y los arreglos musicales de esta inspiradora balada estuvieron a cargo de Manny Benito, presidente de Rejoice Music, sello discográfico que firmó con las hermanas Reyna y Danae como uno de los premios al ganar el reconocido concurso musical, cuya final se celebró en la ciudad de Miami en el marco de la convención Expolit 2016.

Gira internacional

Las talentosas cantautoras cerraron con broche de oro el 2017 con una por Suramérica, específicamente en Colombia visitando diferentes ciudades y compartiendo con varios medios de comunicación e iglesias.  «Fue una experiencia maravillosa. Nos llenó de felicidad el ver cómo la audiencia aceptó nuestro ministerio y la producción musical; especialmente el sencillo “Digno de Adoración”. Estamos agradecidas con Dios por la oportunidad que nos dio de llevar nuestra música a este hermoso país el cual llevamos en el corazón».

En las próximas semanas Reyna y Danae iniciarán una gira promocional en Estados Unidos, donde estarán compartiendo con los diferentes medios de comunicación lo más reciente que está sucediendo en su ministerio musical y las fundaciones a las cuales apoyan.

«El mensaje que queremos transmitir en la gira es: Que confiar y depender en el Señor es un camino seguro – declararon. Cuando un hombre o una mujer conoce su lugar en el reino de Dios y deposita su confianza en su creador, las pruebas que vengan no te debilitarán sino que serán los escalones que Dios usará para cumplir Su propósito en tu vida».

Acerca de Reyna y Danae

Las hermanas nacieron en Baracoa, una ciudad rural de Guantánamo, Cuba.  Desde las edad de seis y cuatro años respectivamente empezaron a servirle al Señor a través del canto.  En agosto de 1995 crearon oficialmente el dueto que antes solía llamarse: Las hermanas Aguilar. En el año 2000 ganaron el Concurso Nacional de Canto Cristiano realizado por DEMAD en Cuba.  Llevaron su ministerio musical por toda Cuba y fuera de esta.  Participaron en muchísimas iglesias y retiros.  En el 2009 lanzan su primer álbum titulado: “A la manera de Dios” el cual consta de nueve temas y maneja cinco diferentes géneros musicales.  Ese mismo año se trasladan a La Habana y de allí deciden radicarse en los Estados Unidos. Es en ese país en donde su ministerio creció e internacionalizó de manera impactante y aun más luego de ganar el prestigioso concurso “Rejoice Music Talent” cuyo premio es firmar con el sello discográfico  Rejoice Music y la producción de un disco.  En el 2017 lanzan su segundo proyecto musical titulado “Pienso en Tí” que consta de ocho temas, producido por el maestro Manny Benito, quien a la vez realizó los arreglos del disco.

Tercer Cielo estrenó su nuevo sencillo digital «Comenzar de nuevo»

 

 

Redacción Betty Meza de Promeza MG) – El pasado viernes, 19 de enero de 2018, el reconocido dueto Tercer Cielo estrenó el sencillo “Comenzar de nuevo”, uno de los temas candidato a ser incluido en su tan esperado disco, cuyo lanzamiento está previsto para el mes de marzo de este año. El disco promete sorprender al público con un repertorio de canciones inéditas y duetos con amigos invitados de alto perfil.

Después del nacimiento de su segunda hija, Aria Belle, Juan Carlos y Evelyn tomaron una pausa de 4 años de los estudios de grabación. Ahora regresan con una propuesta fresca con motivo de la celebración de sus doce años de matrimonio para simbolizar su promesa mutua de mantenerse unidos a pesar de las tormentas que la vida pueda traer.

“Comenzar de Cero”

Habla de una pareja que no se rinde ante ninguna circunstancia amarga porque saben que Dios está con ellos», comentó Evelyn, emocionada por el tema. «Cada canción es un testimonio personal», aseguró la artista mexicoamericana y creadora de los productos Beautified by Evelyn Herrera™.

La canción es una balada pop, de la autoría y producción del mismo Juan Carlos Rodríguez, la cual conserva el sello creativo que caracteriza a todas sus producciones con letras dirigidas a los matrimonios. «Queremos que nuestra música edifique vidas, especialmente a las parejas, con temas como este», comentó el talentoso cantautor dominicano.

El tema musical viene acompañado de un video de animación creado por este talentoso joven, quien se encuentra estudiando animación tridimensional y producción de cine. Además, cuenta con el acompañamiento de una orquesta sinfónica de 35 músicos de la República Checa, dirigidos por el productor ecuatoriano Pablo Aguirre, quien se ha destacado trabajando para artistas como Luis Miguel, Camila y Marco Antonio Solís.

Con tan sólo una semana desde su lanzamiento digital, la canción ha sido acogida por sus seguidores en las redes sociales con casi un millón de visitas en YouTube. Sin duda alguna, esta propuesta musical se añadirá a la lista de éxitos que han establecido a esta pareja como uno de los talentos más influyentes del mercado cristiano.

Disponible en todas las plataformas digitales, incluyendo iTunes, Spotify, Pandora, y YouTube. Te invitamos a que la escuches y la compartas en tus redes sociales. Con seguridad, encontrarás un nuevo motivo para “Comenzar de nuevo”.